De acuerdo con las revelaciones de Giammattei, se interceptaron llamadas dentro de una prisión que daban "luz verde, como dicen los pandilleros, sobre mi cabeza". El líder del Partido Vamos no aportó mayores detalles sobre el origen o las razones de este plan, pero por estas horas se recordó un dato sobre su pasado.
El operativo culminó con la recuperación del control penitenciario pero con siete presos muertos, algunos de ellos sindicados como líderes de la organización que tenían montada los internos. Giammattei fue considerado "un héroe" por una población harta de la violencia. Sin embargo fue enjuiciado y permaneció 10 meses en prisión, lo que le dio proyección política nacional.
Máxima tensión y dispersión
En este contexto, Giammattei tomará las riendas de un país que despedirá "con alivio" al saliente mandatario, Jimmy Morales.
"Se va con una tasa de aprobación muy baja. El rechazo ha sido brutal, menos del 18 % lo aprueba. Creo que es el porcentaje más bajo de los últimos 20 años", dijo a Sputnik Edgar Ortiz, director del Área Jurídica de la Fundación Libertad y Desarrollo de Guatemala.
Morales deja una Guatemala sumamente fragmentada, como quedó demostrado tras la primera vuelta de las elecciones el 16 de junio, cuando Giammattei fue el segundo más votado. "Vamos a tener la dispersión más alta en nuestra historia democrática, vamos a tener nueva bancadas representadas" en el Congreso, graficó Ortiz.
Por otro lado, Morales deja un país con problemas financieros y sin presupuesto aprobado para 2020, por lo cual las posibilidades del Ejecutivo son muy limitadas hasta tanto logre alianzas que le posibiliten exponer sus planes y votar los recursos. En noviembre, a más tardar, debería sancionarse el presupuesto para el año entrante.
Otra mala noticia para la nueva administración, dijo Ortiz, es que si bien faltan algunos datos, los especialistas proyectan que 2019 será el año con la recaudación "fiscal más baja con respecto al PIB desde 1995, previo a la firma de los Acuerdos de Paz de Guatemala".
Unos se van, a otros los traen
Por otro lado, la administración entrante tendrá que posicionarse en un tema sensible para los guatemaltecos como la migración. Pero en este caso no por los que se van sino por el acuerdo de Tercer País Seguro que Morales firmó con Donald Trump a mediados de 2019.
"Leía hace una semana una entrevista a Giammattei en el diario británico The Economist. Dijo que nunca ha visto los papeles del acuerdo. Él ha pedido constantemente al Gobierno de Morales información pero no se las han dado", y por tanto no conoce el alcance real del pacto.
"Guatemala aca va ser un actor pasivo, un mero espectador y Giammattei no tiene prácticamente ningún poder de negociación" para revertir el convenio. "En todo caso le va tocar ver qué beneficios puede sacar de ese acuerdo migratorio, quizá negocia más visas de trabajo", planteó el entrevistado.
Morales, inmunidad e impunidad
Morales también será recordado como el presidente que puso fin a la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), creada a impulsos de la ONU y que trabajaba en el país desde 2006.
Varias causas pesan en su contra: desde el financiamiento ilegal de sus campañas, recibir dinero de privados siendo presidente e incluso por la muerte de 41 niñas calcinadas en 2017 en el internado Hogar Seguro.
"Guatemala es parte del Parlamento Centroamericano (Parlacen). Hay una disposición que dice que los presidentes salientes de cada Estado pasan a formar parte del Parlacen, y naturalmente los diputados centroamericanos tienen inmunidad", expresó el entrevistado.
"La gran discusión en Guatemala es que el Parlacen anunció que va adelantar las sesiones del año para justamente el 14 de enero. Es decir, entrega el mando Morales y se abren las sesiones del Parlamento. (...) Él buscará asumir lo más pronto posible para tener inmunidad y quitársela ahí va a ser muy difícil porque históricamente nunca prosperan estas acciones", aseguró Ortíz.