"Las fotos, que documentaban el denigrante hecho y mostraban los bustos del Héroe Nacional cubiertos por sangre de cerdo, fueron hechas públicas a través de internet, con muy breve tiempo después de su realización", subraya una nota publicada por el periódico Granma.
Las autoridades cubanas denunciaron además que "reconocidos seguidores de la derecha de Miami", donde se aglomera la mayor cantidad de emigrados cubanos en Estados Unidos, "aprobaban estos actos de manera entusiasta, la afrenta al simbolismo que encarna la figura del prócer de nuestra independencia".
La nota agrega que "el agravio se denunció como una sucia maniobra mediática para hacer creer que en Cuba existe un clima de inseguridad y violencia".
"No conocemos a esas personas; ningún miembro de nuestra organización ha sido detenido", aseguró un vocero del grupo que mantuvo su anonimato en declaraciones exclusivas a El Nuevo Herald.
Las reacciones a estos hechos ocurridos en las últimas semanas levantaron una ola de protestas en medio de sectores intelectuales, artísticos, estudiantiles y sociales en la isla, que coinciden en repudiar la profanación de símbolos patrios por intereses políticos de determinados grupos que se oponen al Gobierno de La Habana.