El canciller Felipe Solá y el secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Béliz, recibieron en la Casa Rosada a una delegación de Estados Unidos. Los diplomáticos estadounidenses solicitaron una audiencia para exponer su malestar por las actividades de Evo Morales, quien llegó a Argentina el 12 de diciembre.
"Sobre el tema de Evo Morales, hacemos un llamado a la Argentina para que sea un buen vecino al apoyar la democracia boliviana y llamamos a la Administración de Alberto Fernández a trabajar para garantizar que Morales no abuse de su estatus en Argentina", señalaron a la agencia Efe fuentes diplomáticas.
Morales, quien se encuentra asilado en Argentina a la espera que se le conceda estatus de refugiado, convocó a la dirigencia del Movimiento Al Socialismo (MAS) a una reunión para el 29 de diciembre en Buenos Aires en la que debe resolverse la fecha y el lugar de un "gran encuentro" en el que se elegirán los candidatos para los comicios de 2020.
Tras la salida de Morales rumbo a México, la senadora opositora Jeanine Áñez asumió el 12 de noviembre la presidencia de facto en una sucesión sin acuerdo parlamentario aunque avalada por el Tribunal Constitucional.
México otorgó el asilo a Morales, quien sin embargo viajó a Cuba el 6 de diciembre y posteriormente se dirigió a Argentina, donde reside la mayor colonia de bolivianos fuera de su país.
El 18 de diciembre, la Fiscalía de Bolivia ordenó la detención del exmandatario, acusado de "sedición y terrorismo".