El 21 de diciembre el representante para la libertad de prensa de la OSCE, Harlem Désir, llamó a las autoridades de Estonia a abstenerse de imponer restricciones innecesarias al trabajo de Sputnik.
"Los representantes del Estado de Estonia darán explicaciones exhaustivas al representante para la libertad de prensa de la OSCE", dijo el ministro citado por el portal Delfi.
Anteriormente se supo que los empleados de Sputnik Estonia recibieron cartas del Departamento de Policía y la Guardia de Fronteras del país báltico con amenazas directas de iniciar un proceso penal en su contra si no dejan de trabajar para el grupo mediático Rossiya Segodnya, matriz de Sputnik, antes del 1 de enero de 2020.
Las autoridades estonias justifican su exigencia con las sanciones impuestas por la Unión Europea el 17 de marzo de 2014 contra varias personas y entidades a la luz de los acontecimientos en Ucrania.
Rossiya Segodnya, a su vez, insiste en que no figura en ninguna lista de sanciones de la UE.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia manifestó su indignación por el hostigamiento de la agencia y pidió reacción inmediata de las estructuras internacionales.
El presidente ruso, Vladímir Putin, calificó el acoso a la agencia rusa Sputnik Estonia de "una manifestación de cinismo".
A su vez, la directora de la cadena televisiva RT y de Sputnik, Margarita Simonián, llamó a la presidenta de Estonia, Kersti Kaljulaid, a evitar la detención de los periodistas.
El 19 de diciembre, la Federación Internacional de Periodistas (IFJ) instó al Gobierno de Estonia a "respetar la libertad de prensa, independientemente de la nacionalidad de los periodistas".
También el secretario general de la Federación Europea de Periodistas (FEP), Ricardo Gutiérrez, llamó a Estonia a que se abstenga de imponer restricciones innecesarias sobre el trabajo de periodistas extranjeros.