"Este es un día oscuro para la verdad y la justicia", afirmó Netanyahu en un comunicado, tildando la decisión de Bensouda de "escandalosa e infundada".
Netanyahu calificó el anuncio del tribunal con sede en la ciudad holandesa de La Haya, al que Israel se ha negado a adherirse desde su creación en 2002, de "herramienta política" contra su país.
"Tiene jurisdicción solo en demandas presentadas por estados soberanos, pero nunca ha habido un Estado palestino. No aceptamos ni aceptaremos esta injusticia. Continuaremos luchando con todas las herramientas a nuestra disposición", sentenció Netanyahu.
También expresó su "asombro" porque Bensouda "dice que es un crimen, un crimen de guerra que los judíos vivan en su tierra natal, la tierra de la Biblia, la tierra de nuestros antepasados", en referencia a las colonias judías en territorio palestino ocupado.
Todos los asentamientos judíos en Cisjordania, incluida Jerusalén este, y en los Altos del Golán sirios ocupados son ilegales, según el derecho internacional.
Por su parte, Yair Lapid, colíder de la coalición de centro-derecha israelí Azul y Blanco, criticó el anuncio de la Fiscalía de la CPI y dijo que era "una capitulación ante la propaganda falsa y difamatoria del terror palestino".
"Como alguien que era miembro del gabinete y miembro del Comité de Asuntos Exteriores y Defensa [de la Knéset, Parlamento israelí], puedo testificar que en todos los anales de la guerra no ha habido un ejército que haya hecho más que las Fuerzas de Defensa de Israel para evitar dañar a inocentes".
Cabe la posibilidad de que miembros de grupos armados palestinos también sean investigados. Un informe de la Fiscalía de la CPI publicado hace dos semanas cita el lanzamiento de cohetes desde la Franja de Gaza hacia Israel.