El consumo de alimentos con un alto contenido de carbohidratos refinados aumenta el riesgo de insomnio, advierten los investigadores.
El cuerpo produce insulina en un intento de reducir los niveles de azúcar, y esto puede llevar a la liberación de hormonas, incluyendo adrenalina y cortisol, que causan trastornos del sueño, explican los expertos, según el portal MedicalXpress.
Dado que no solo las mujeres en la posmenopausia, sino la mayoría de las personas experimenta aumentos rápidos en los niveles de azúcar en la sangre después de consumir carbohidratos refinados, los autores opinan que estos resultados podrían aplicarse a la población en general.
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— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 16 марта 2019 г.
Para normalizar el sueño, los científicos sugieren incluir frutas y verduras en la dieta porque la fibra que contienen disminuye la tasa de absorción, lo que ayuda a prevenir aumentos rápidos de azúcar en la sangre.