Esta es la razón por la que un equipo de científicos, encabezado por el epidemiólogo Usama Bilal de la Universidad de Drexel, decidió estudiar de una manera más profunda este problema. La mejor manera para hacerlo era poner bajo microscopio a seis ciudades grandes de la región como:
- Buenos Aires (Argentina);
- Belo Horizonte (Brasil);
- Santiago (Chile);
- San José (Costa Rica);
- Ciudad de México (México);
- Panamá (Panamá).
Los investigadores escogieron precisamente estas urbes de la región por una simple razón: tenían datos suficientes sobre un gran número de distritos o comunas. Este factor ayudó a los científicos a enfocarse en el análisis más profundo de las disparidades en la esperanza de vida registradas dentro de estas ciudades y no entre ellas.
Los resultados de su estudio, publicado en la revista The Lancet Planetary Health, revelaron que una residente de un distrito pobre de Santiago vivirá 18 años menos que una mujer que viva en un barrio más favorecido de la capital chilena. En cuanto a los residentes del sexo masculino, esta diferencia es de 9 años.
"Esta es la primera vez que se mapea la magnitud extrema de las desigualdades en esperanza de vida en varias ciudades de Latinoamérica y constituye un primer paso fundamental para poder disminuirlas o erradicarlas en un futuro", explicó Usama Bilal, citado por el periódico español El País.
Los resultados de esta investigación señalan que es importante desarrollar políticas urbanas que permitan a las autoridades locales disminuir disparidades sociales y mejorar las condiciones de vida en los distritos más pobres, opina la coautora del estudio Ana Diez Rou, del proyecto SALURBAL.