"La declaración del señor Assange como víctima de ese presunto espionaje, el próximo 20 de diciembre, desde Westminster, ante la justicia española, será fundamental para poder demostrar la imposibilidad de que sea entregado a los Estados Unidos", dijo en una entrevista con Sputnik Martínez.
"Esta empresa presuntamente habría estado trabajando para la inteligencia de EEUU, y habría introducido micrófonos escondidos en extintores dentro de la Embajada, habría cambiado las cámaras internas por otras con micrófonos que grababan las conversaciones, habría fotocopiado los documentos de identidad de sus visitas, e incluso habría en ocasiones abiertos los dispositivos electrónicos de los visitantes para manipularlos", indicó.
Martínez afirmó que, según la investigación, "toda esa información habría sido presuntamente remitida a la inteligencia de EEUU".
"Por lo tanto, la investigación penal abierta en España es muy relevante toda vez que demostraría que el señor Assange y sus abogados habrían sido espiados en la Embajada de Ecuador en Londres para las autoridades norteamericanas, lo que conllevaría que el Reino Unido deba denegar la entrega a un país donde no se habrían respetado las mínimas garantías de defensa", enfatizó.
Preguntado sobre la próxima vista del ciberactivista australiano, Martínez informó que esta se celebrará el próximo 19 de diciembre "en la Corte de Westminster, pero de mero procedimiento, para aportar pruebas, en la que el señor Assange no estará presente".
"Posteriormente, el 25 de febrero de 2020 se celebrará la vista de extradición en la que se decidirá si el señor Assange es entregado a EEUU o, como esperamos, se deniega la solicitud norteamericana", señaló.
El tribunal de Westminster prevé en febrero de 2020 examinar la extradición de Assange a EEUU, país que podría condenar al activista a más de cien años de prisión por publicar información comprometedora a través del portal WikiLeaks.
Assange se encontraba refugiado desde 2012 en la Embajada de Ecuador en Londres.
El Gobierno de Lenín Moreno le retiró el asilo el 11 de abril de este año. La policía británica detuvo al periodista ese mismo día por haber violado las condiciones de libertad condicional en 2012.