"¿Si se trata de una crisis en las relaciones? No hay nada bueno en eso, pero no creo que haya o deba surgir alguna crisis", expresó Putin en una conferencia de prensa tras la cumbre del denominado Cuarteto de Normandía (Alemania, Francia, Rusia y Ucrania) en París.
El 4 de diciembre, el Ministerio de Exteriores alemán declaró personas no gratas a dos diplomáticos rusos en relación con la investigación del asesinato de un georgiano en Berlín en agosto pasado.
"Haremos todo para resolverlo y ayudar a nuestros colegas alemanes", declaró.
Sin embargo, el mandatario ruso tildó de poco apropiadas las acciones de Berlín hacia los diplomáticos rusos, no vinculados con el asunto, máxime que se basaron "solo en hipótesis preliminares".
"Me pregunta usted sobre nuestra respuesta. Existen prácticas no escritas (...) para estos casos: expulsan a nuestros diplomáticos, entonces nosotros expulsamos a los suyos", dijo Putin.
El 23 de agosto un desconocido disparó desde una bicicleta en la cabeza a un ciudadano georgiano en la capital alemana; el sospechoso fue detenido el mismo día.
Sin embargo en el comunicado de la Fiscalía alemana el asesinado figura bajo el nombre de Tornike K.
En otra investigación, los tres medios identificaron al asesino de Khangoshvili como el ruso Vadim Krásikov, de 54 años, que hasta 2015 estaba en búsqueda en Rusia por supuestamente asesinar a tiros a un empresario en Moscú, también desde una bicicleta.
Mientras la información de los periodistas apunta a que el asesino tiene vínculos con las autoridades rusas, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, aseguró que se trata de "hipótesis infundadas".