Los detenidos —ocho hombres y tres mujeres, de edades comprendidas entre los 20 y los 63 años— están presuntamente implicados en el lanzamiento de bombas incendiarias contra una comisaría policial el 20 de octubre pasado.
La Policía sospecha que las armas —cuchillos, sables, porras, gas pimienta y petardos, además de la pistola— iban a usarse durante una marcha que el opositor Frente Civil de Derechos Humanos planea realizar este 8 de diciembre.
"Su plan es usar el arma para crear el caos durante la marcha más tarde hoy, disparar a nuestros agentes, o culpar a los agentes de herir a viandantes inocentes", cita SMCP al superintendente Li Kwai-wah.
Este 8 de diciembre por la tarde, un día antes de que Hong Kong cumpla seis meses de protestas, el mayor grupo prodemocracia planea celebrar un mitin en Victoria Park y marchar luego hacia el centro de la ciudad.
El Gobierno hongkonés accedió a retirar a principios de septiembre el controvertido proyecto, que habría facilitado la entrega de disidentes políticos a Pekín, pero rechazó otras demandas de la calle, entre ellas amnistiar a activistas detenidos, iniciar una investigación independiente de los supuestos excesos policiales y relanzar el proceso de reformas políticas.
Las protestas derivaron en violentos enfrentamientos entre activistas y la Policía con al menos 2.600 heridos, incluidos 470 agentes, hasta finales de noviembre.