En el caso de que se decida seguir adelante con el proyecto, se gastarán entre 4.600 y 6.200 millones de dólares. Sin embargo, destacó que esos millones no están previstos en el programa de armamento estatal de Rusia aprobado hasta el año 2027.
La fuente señaló que el Ministerio de Defensa está al tanto de los proyectos de portaviones que se presentan por las oficinas de diseño pertinentes. Es posible que la tecnología necesaria para fabricar el nuevo se ponga a prueba en los buques de asalto anfibio, cuyo ensamblaje comenzará en 2020.
Actualmente Rusia dispone solo de un portaviones, el Almirante Kuznetsov. Actualmente está en mantenimiento. Se trata de una mezcla entre un portaviones y un buque portamisiles, puesto que combina las capacidades de los dos tipos de naves. Al mismo tiempo, los altos mandos militares de Rusia señalaron en múltiples ocasiones que era necesario construir uno nuevo.