"Si van a adquirir una plataforma rusa importante como el Sukhoi-35 o el Su-35, eso los pone en riesgo de sanciones y los pone en riesgo de quedar relegados al segundo plano en la seguridad regional. Estamos trabajando con ellos para abordar sus necesidades [de autodefensa], pero también hemos sido muy transparentes con ellos en este tema", dijo el diplomático.
Añadió que Egipto "es muy consciente de lo que pone en riesgo".
Según el funcionario, terceros países también llaman a El Cairo a que no ponga en peligro los avances logrados.
En marzo el periódico Kommersant publicó que Moscú y El Cairo firmaron un acuerdo valorado en 2.000 millones de dólares, que entró en vigor a finales de 2018 y según el cual Rusia suministraría a Egipto entre 2020 y 2021 "más de una veintena" de cazas Su-35.
Más tarde, el Servicio Federal para la Cooperación Técnica Militar de Rusia desmintió esta información.
El diario The Wall Street Journal difundió a principios de noviembre que el Pentágono y el Departamento de Estado de EEUU, en una carta conjunta, advirtieron a las autoridades de Egipto sobre posibles sanciones en caso de adquisición de cazas rusos Su-35.
El 21 de noviembre, la portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, declaró que las amenazas de Washington de sancionar a Egipto por la compra de cazas Su-35 son otro ejemplo de "conducta agresiva".