En varias ciudades de Irán en los últimos días ocurrieron protestas provocadas por la decisión de las autoridades del país de aumentar los precios de la gasolina, algunas manifestaciones devinieron en disturbios.
"Estamos especialmente alarmados por que el uso de armas militares supuestamente haya provocado la muerte de un número significativo de personas en todo el país", dijo el portavoz.
La Acnudh considera que entre el 15 de noviembre y el 18 de noviembre pasado en el país murieron unas 1.000 personas que participaban en las protestas, mientras las autoridades iraníes informan de un manifestante y tres guardias del orden fallecidos.
El representante de Naciones Unidas recordó que en Irán no existe ninguna oficina de ese organismo que se ocupe de los derechos humanos, hecho que junto con la ausencia de internet dificulta la verificación de los datos.
"Instamos al Gobierno a restablecer de inmediato el acceso a internet y otros medios de comunicación que son necesarios para la libertad de expresión y el acceso a la información", subrayó Colville.