La fórmula que es popularmente conocida se basa en que la esperanza de vida de los perros y las personas: la media de vida de los perros es de 10 años, y para las personas, 70 años. Sin embargo, los investigadores dicen que han elaborado una nueva fórmula, mucho más certera, para convertir los años de perros en años humanos.
Los científicos han demostrado que el estudio del reloj epigenético sirve para estimar la edad de una persona y el impacto que las enfermedades le han causado en su cuerpo, e incluso, predecir su esperanza de vida, según publicó Science Magazine. Algo similar sucede con otras especies, como los ratones, chimpancés, lobos y perros, que también pareciera que tienen relojes epigenéticos.
El genetista Trey Ideker de la Universidad de California, San Diego, y sus colegas científicos compararon el reloj humano del de los perros. Todos los perros, sin importar la raza, siguen una trayectoria de desarrollo similar, llegando a la pubertad cuando cumplen alrededor de 10 meses y muriendo antes de los 20 años. Sin embargo, para aumentar sus posibilidades de encontrar factores genéticos asociados con el envejecimiento, el equipo de Ideker se centró en una sola raza: Labrador retriever.
Escanearon el ADN en los genomas de 104 perros, desde las cuatro semanas hasta los 16 años de edad. Su análisis reveló que los perros (al menos los labradores) y los humanos envejecen de manera similar.
"Es una hermosa demostración de los rasgos conservados de los relojes epigenéticos compartidos por perros y humanos", agregó.
El equipo de investigación de Ideker también realizó un procedimiento un poco más complicado que "multiplicar por siete" para convertir la edad canina en humana.
La nueva fórmula, que se aplica a los perros mayores de un año, dice que las etapas de vida de los perros y de los humanos… son muy similares.
"Por ejemplo, un cachorro de siete semanas de edad equivaldría aproximadamente a un bebé humano de nueve meses de edad, ambos están empezando a brotar los dientes", se lee en Science.
La fórmula también se ajusta muy bien a la esperanza de vida media de los labradores (12 años) con la esperanza de vida mundial de los seres humanos (70 años). En general, el reloj epigenético canino al principio funciona mucho más rápido que el humano, y luego se ralentiza: ese labrador de dos años puede seguir actuando como un cachorro, pero es de mediana edad.