"Le dije al pueblo brasileño: 'No soy Lula, soy una idea que la gente asumió'", enfatizó el exmandatario.
La ciudad de Recife, donde tuvo lugar el mitin, quedó inundada por gente marchando con imágenes de Lula. Los asistentes usaron máscaras con su cara y cantaron diversos eslóganes de apoyo.
En el 2018, el Tribunal Supremo de Brasil le ordenó que cumpliera condena antes de que se agotaran todos sus recursos de apelación. Su liberación llegó tras un fallo de la Corte Suprema que dictaminó que las personas solo podían ser encarceladas una vez agotadas todas las apelaciones.