"Paro injusto, no hay ningún pedido, el pedido es solamente fraude, si es fraude que haya organismos internacionales mediante una auditoria, [pero] cuando llega la OEA [los opositores] dicen que quieren autonomía, dicen que se vaya la OEA", afirmó Morales.
Morales ganó los comicios del pasado 20 de octubre, según el Tribunal Supremo Electoral, pero el segundo más votado, el expresidente Carlos Mesa (2003-2005) denunció al día siguiente de las elecciones que un presunto fraude le habría privado de la posibilidad de desafiar al gobernante en una segunda rueda, desatando con ello una ola de protestas urbanas.
El presidente agregó que "los opositores quieren destrozar lo que hemos construido" porque, entre otras cosas, el paro es para dañar económicamente" a Bolivia.
En ese sentido hizo un llamado al pueblo, pese a que reconoció "diferencias", para defender al país y no afectar con el paro a comerciantes, por ejemplo.
La auditoría internacional de las elecciones comenzó el 31 de octubre pasado, encabezada por la OEA (Organización de los Estados Americano), en el marco de un aumento de la violencia opositora en contra de la reelección de Morales.