La jornada de 53 kilómetros empezó en el extremo sur de la isla rusa de Sajalín, el cabo Crillon. Dos horas y 56 minutos más tarde, el kitesurfista llegó al puerto Wakkanai, en la isla japonesa de Hokkaido.
Aunque el estrecho tiene cerca de 40 kilómetros de longitud, Novozhéyev se vio obligado a extender su aventura en más de 10 km, ya que los marineros nipones no le permitieron arribar al cabo de Soya debido a la gran cantidad de redes de pesca en estas aguas.
Esta no es la primera hazaña de Novozhéyev, en 2011, el deportista cruzó el estrecho de Bering.