"Me dirijo a los manifestantes: estoy dispuesto a reunirme con sus representantes para escuchar sus exigencias concretas", dijo Aoun en un discurso que fue transmitido por los canales de televisión libaneses.
Añadió que los manifestantes también deberían escuchar los pensamientos y las preocupaciones de las autoridades "a causa del desplome financiero del país".
"Examinaremos lo que tenemos que hacer juntos para satisfacer sus demandas y evitar caos y derrumbe", afirmó Aoun.
Graffiti in the streets of Lebanon in wake of protests that swept all the country due to government planned imposed taxes on gasoline, tobacco and online phone calls such as through WhatsApp #Lebanon #LebanonUprising pic.twitter.com/jx5Ez6cqvw
— Sputnik Insight (@Sputnik_Insight) October 22, 2019
Además, Aoun dijo que el paquete de reformas económicas que presentó el 21 de octubre el primer ministro libanés, Rafic Hariri, será el "primer paso para salvar al Líbano y eliminar el espectro del colapso financiero y económico".
El jefe del Estado libanés se comprometió a luchar contra la corrupción estatal como exigen cientos de miles de manifestantes en todo el país desde hace una semana, y aseguró que apoyaría nuevas leyes.
Aoun prometió hacer todo lo posible para implementar una reforma radical, pero también dijo que el cambio solo puede provenir de las instituciones estatales.
"El régimen no se puede cambiar en las plazas, esto solo puede suceder a través de las instituciones estatales", subrayó.
Aoun, que habló una semana después de que empezaran las manifestaciones multitudinarias en el Líbano para pedir la caída del gobierno y el fin de la corrupción de la clase política, invitó a los manifestantes a mantener con él "un diálogo constructivo".
La "llamada de los manifestantes no quedará sin respuesta", aseveró.
No obstante, pidió a los manifestantes que dejen de bloquear carreteras y el transporte público.
Se trata de las protestas más importantes que se han producido en los últimos años en el Líbano.
Las protestas se iniciaron de forma espontánea el 17 de octubre después de que las autoridades anunciaran que aprobarían una tasa de 20 centavos de dólar por día para las llamadas de voz por redes sociales como WhatsApp, Facebook o Viber con el fin de incrementar los ingresos estatales.
El primer ministro libanés, Saad Hariri, anunció el 21 de octubre la adopción de una serie de reformas económicas, hasta ahora bloqueadas por las divisiones dentro de la coalición gubernamental, tras varios días de protestas multitudinarias.
Hariri anunció un "presupuesto para 2020 sin impuestos adicionales para la población" y un déficit del 0,6% del PIB, así como un recorte del 50% en su salario y los del presidente, expresidentes, ministros y parlamentarios, y la imposición de nuevos impuestos a los bancos. Además, eliminó el Ministerio de Información y otros organismos.
