Desde entonces el país se encuentra bajo medidas de excepción decretadas por el presidente, Sebastián Piñera, que incluyen toque de queda entre las 19 y las 6 horas. "Estamos en guerra contra un enemigo muy poderoso", dijo este domingo en cadena nacional el mandatario sobre la militarización de la seguridad interior.
Los primeros en reaccionar fueron los estudiantes que espontáneamente realizaron "evasiones" en las estaciones para no pagar boleto. A la segunda semana se sumaron otros colectivos, lo cual motivó a Metro —concesionaria del servicio de transporte subterráneo— a reforzar las medidas de seguridad y al Ejecutivo a brindar apoyo con policías y militares.
El viernes los enfrentamientos se extendieron desde las primeras horas y se fueron intensificando hasta registrarse saqueos, incendios y distintos tipo de destrozos en las principales regiones del país. Por su parte, el Instituto Nacional de Derechos Humanos denunció que varias de las personas detenidas durante los enfrentamientos que se dieron en varias localidades sufrieron malos tratos, torturas y vejaciones sexuales.
El Gobierno echó marcha atrás con el aumento mediante un proyecto de ley que se votó este domingo 20 en Diputados, pero para entonces ya había registrado 11 muertos y 1.700 detenidos.
"Esto ya no tiene nada que ver con el alza del pasaje sino con un terremoto social que te habla de muchísimas cosas que se estaban incubando en Chile y que los movimientos sociales vienen denunciando", apuntó el también profesor en la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso.
"Pero la élite política y empresarial no ha querido escuchar y hoy se encuentra ante una realidad que no sabe realmente cómo manejar. De norte a sur las principales ciudades están movilizadas", apuntó.
Santander destacó que a pesar "del estado de excepción y de todo lo que se intentó hacer, la protesta social fue aún más intensa y masiva el domingo que el sábado y el viernes".
"Chile es el país donde nace el neoliberalismo y Milton Friedman y su 'Chicago boys' hacen este experimento neoliberal que después se expande. Es interesante lo que está pasando aquí: el pueblo chileno le está dando una estocada, profunda, no creo que final ahora, pero profunda a un modelo que nace en este país y se ha tratado de exportar como ejemplo para el resto del mundo", sentenció el periodista.