Varios miles de personas se manifestaron en la tarde en Barcelona entre un fuerte despliegue policial en la sexta jornada consecutiva de movilizaciones contra la decisión del Tribunal Supremo que condenó por delitos de sedición, malversación y desobediencia a doce líderes independentistas.
"Es la sentencia lo que nos trae a la calle pero también nos manifestamos contra la brutalidad policial de los últimos días", señala a Sputnik un joven manifestante que se identifica como David.
A lo largo de la marcha, que por el momento transcurre sin incidentes, los manifestantes independentistas corearon lemas como "puta España" y, sobre todo, profirieron insultos en múltiples ocasiones a los agentes de Mossos d'Esquadra —la policía autonómica catalana— y Policía Nacional española desplegados en la ciudad.
La manifestación comenzó en Plaza Urquinaona, que en la noche del viernes 18 fue escenario de violentos enfrentamientos, quema de barricadas y lanzamiento de gases lacrimogenos.
Monserrat, una mujer de 80 años, se apoya en una valla calcinada mientras los manifestantes inician su marcha.
Señalando los destrozos y el mobiliario quemado que todavía queda en la plaza, la señora lamenta las escenas de violencia, pero culpa exclusivamente a los cuerpos policiales.
"Estos brutos vienen a aplastarnos después de lo que ha pasado [la sentencia] y es normal que luego los jóvenes se enfaden y hagan cosas que no deberían hacer", apunta.
Tras el inicio de la manifestación en Plaza Urquinaona, los protestantes marcharon por la ciudad y miles iniciaron una concentración a las puertas del Tribunal Superior de las Justicia, blindado por vallas y furgones de Mossos.
Cataluña acumula ya cinco días de disturbios en las protestas contra la decisión del Tribunal Supremo de condenar por delitos de sedición, malversación y desobediencia a doce líderes políticos y civiles catalanes que fueron enjuiciados por el proceso independentista que llevó al referéndum unilateral de autodeterminación del 1 de octubre de 2017.
Desde el 14 de octubre, los Servicios de Emergencias Médicas de Cataluña atendieron a 576 personas por heridas relacionadas con los altercados.
Actualmente 19 de esas personas permanecen hospitalizadas. Entre los heridos destaca el caso de un joven de 17 años al que los Mossos d"Esquadra reventaron un ojo con un proyectil de foam.