"Esta es una respuesta razonable a una crisis sobrevenida con el objetivo de amortiguar en términos de empleo y actividad económica la situación de un sector tan importante de nuestra economía como es el turismo", señaló Calvo.
El volumen total de la ayuda ascenderá a 700 millones, de los cuales 200 millones servirán de apoyo al sector turístico "a fin de atender las necesidades financieras de los afectados".
Además, anunció una partida de 15 millones para la comunidad autónoma de las Islas Canarias y 8 para las Islas Baleares, "para consolidar la diversificación y mejorar el destino".
Esta línea de crédito destinada a las empresas se amplía de 300 a 500 millones, respecto a lo anunciado la semana pasada.
La vicepresidenta también anunció que se hará "un esfuerzo combinado en los planes específicos de empleo" para evitar pérdida de puestos de trabajo.
El grupo británico Thomas Cook, el segundo turoperador global y el más antiguo del mundo, entró en bancarrota hace dos semanas tras fracasar las negociaciones con sus acreedores, dejando a cientos de miles de turistas varados en el extranjero, y muchos otros con vacaciones canceladas.
En el año 2018 España recibió un total de 82,8 millones de turistas extranjeros, siendo los de ell Reino Unido (18,5 millones) el grupo más numeroso, lo que hace que el país sea especialmente vulnerable ante la quiebra de Thomas Cook.
El sector turístico aporta de forma directa a la economía española 137.020 millones de euros, lo que supone un 11,7% del PIB, según los datos más recientes del Instituto Nacional de Estadística, publicados a finales de 2018.
Además, el turismo sostiene 2,6 millones de empleos (12,8% del total), por lo que la estabilidad económica del país está muy ligada a la salud del sector.