"Uribe, tirano, el pueblo está verraco", coreaban decenas de jóvenes en inmediaciones del Palacio de Justicia, en el centro histórico de Bogotá, donde se celebró la audiencia luego de que la policía alertó de posibles desmanes y riesgos para el expresidente, quien iba a ser interrogado en el norte de la ciudad.

"Es inaudito que alguien como Uribe, con tantas investigaciones y crímenes a cuestas, siga libre; este es el momento para que la Corte demuestre su independencia y Colombia vuelva a creer en la justicia con Uribe tras las rejas", dijo a Sputnik una joven universitaria manifestante, Gabriela Camacho.
La Corte Suprema de Justicia le abrió investigación a Uribe el 24 de julio de 2018, cuando el entonces magistrado de la Sala Penal, José Luis Barceló, consideró que había elementos para abrir un caso por soborno y fraude procesal.
La investigación surgió luego de que el expresidente denunciara al senador de izquierda Iván Cepeda (del partido Polo Democrático) se presentar supuestamente falsos testigos en su contra.
La Corte, en cambio, encontró elementos para considerar que era Uribe quien buscaba presionar a exparamilitares presos para que declararan contra Cepeda.
A raíz de esos hallazgos, la Corte abrió dos investigaciones, una por la denuncia de paramilitarismo, que se encuentra en etapa preliminar, y otra por la presunta presión a Monsalve para que se retractara, caso por el cual compareció el martes.
"Es una vil patraña, un plan de la izquierda de este país para difamar al mejor presidente que ha tenido este país en su historia, el único que despejó las vías de la incursión de la guerrilla de las FARC cuando se la pasaban secuestrando gente a diestra y siniestra", dijo un manifestante favorable a Uribe, Alirio Motoa, que junto a varios cientos de seguidores se concentraron en el céntrico Parque Nacional.
La manifestación pro-Uribe comenzó a las 11:00 hora local (16:00 GMT) y se extendió hasta el comienzo de la tarde con duros cruces de palabras hacia opositores que transitaban por la zona.
En otras ciudades del país también hubo movilizaciones a favor y en contra del expresidente.
La audiencia indagatoria se suspendió a mediodía por el almuerzo y se reanudó por la tarde.
Uribe salió acompañado de su grupo de escoltas, quienes lo ingresaron por el sótano del edificio para evitar a la prensa y a los pocos manifestantes que aún quedaban en el lugar; en las inmediaciones aún permanecían agentes policiales y del Escuadrón Móvil Antidisturbios.
La Corte Suprema se tomará varias semanas para decidir si avanza en la investigación o la archiva, y también si Uribe debe cumplir prisión preventiva o no.
El eventual fallo del proceso puede llevar varios años.
"Que caiga el tirano. ¿Cuántos procesos tiene este cínico y no se le juzga? Necesitamos justicia, justicia, justicia. Uribe, a la cárcel", se leía en una de las pancartas que sostenían otros manifestantes en el lugar, mientras cerca de ellos otros opositores llevaban fotos de personas desaparecidas junto a esqueletos de cartón.
De esos hechos responsabilizó a los superiores de su hijo, así como a Uribe y al también expresidente Juan Manuel Santos (2010-2018).
"Ni el Gobierno ni la cúpula militar han dejado que se investigue este asesinato. Los falsos positivos son política de Estado", señalaba la mujer en una pancarta, a través de la cual recordó los asesinatos de jóvenes en varias regiones del país por parte de militares que los hicieron pasar por guerrilleros caídos en combate para así obtener ascensos y prebendas.
Frente a ella, un grupo de personas que se decían "venezolanos por decisión" coreaban a favor de Uribe, a quien llamaban "amigo" y esperaban que fuera absuelto.
"¡Viva el presidente Uribe! Te queremos Uribe, te queremos", decían como muestra de apoyo frente al Palacio de Justicia.
Esta es la primera vez que en Colombia un expresidente es indagado por la Corte Suprema, donde están radicados al menos 14 casos contra Uribe.