Alechine nació en Moscú y se mudó a Argentina cuando tenía cinco años. Estudió bioquímica, hizo un master en ciencias biomédicas y un doctorado en genética humana en la Universidad de Buenos Aires. Durante los últimos cuatro años trabajó como comunicadora científica, y desde 2017 ha estado viajando por el mundo como nómada digital.
Alechine forma parte de la organización internacional Homeward Bound, que busca visibilizar el trabajo que realizan las mujeres científicas en el mundo. El proyecto, que comenzó a realizar las expediciones en 2016, tiene el objetivo de empoderar a las mujeres científicas para que sean portavoces y generadoras del cambio que se necesita para mitigar los efectos del cambio climático.
La Antártida se caracteriza por tener un clima hostil, y quizá por ello también, por ser un territorio donde el hombre ha intervenido en menor medida que el resto de los continentes.
Alechine contó a Sputnik que está armando su mochila siguiendo los consejos de las mujeres que viajaron en expediciones anteriores. La principal recomendación es llevar la menor cantidad de cosas posibles, pero procurar que no falte ropa térmica.
"Es muy importante llevar baselayers (ropa de base, segunda piel), como camisetas y pantalones térmicos. También un calzado que no resbale en la superficie del barco, porque probablemente la mayor parte del tiempo esté mojado", dijo Alechine.
Alechine también contó que otra de los consejos es llevar "cosas que nos puedan reconfortar en momentos en que estemos extrañando nuestro hogar", como libros, fotos, cartas, "algún tipo de chocolate o té que te ayude mientras estés lejos de tu zona de confort".
A su vez, desde la organización se promueve que escriban un diario, cuestión que ya empezaron a hacer, y se recomienda que tengan "estrategia de yoga o meditación para poder pasar esos momentos de un poco de angustia, extrañar".
"El tema del diario me parece sumamente importante, yo lo uso mucho en momentos que por ahí necesito canalizar emociones o situaciones que me van pasando en la vida. También diariamente hago meditación y algún ejercicio de respiración, eso no es algo que 'llevo', es una herramienta que tengo conmigo", contó Alechine.
Otro tema es el de los mareos: en general el mar está muy turbulento en el cruce del Pasaje de Drake, y recomiendan que lleven medicación o suplemento dietario acorde. "El año pasado las chicas que fueron experimentaron olas de 12 metros, el barco se movía mucho", recordó.
"Será una experiencia transformadora, creo que voy a volver no siendo la misma persona que cuando me fui, me parece que son experiencias que a uno lo tocan mucho y que uno conecta desde un lugar muy personal", concluyó.