Como un alternativa económica ante la escasez de petróleo que enfrenta la isla y la necesidad de solventar la campaña contra el Aedes aegypti, la cría de peces guppies en policlínicos médicos y ambientes naturales es la propuesta de las autoridades sanitarias como mecanismo de control biológico.
Estos peces de agua dulce, muy populares por la facilidad con que se mantienen en peceras, "no afectan la calidad del líquido y no constituyen riesgo de contaminación" en las aguas donde suele reproducirse el mosquito. Uno sólo puede devorar entre 60 y 150 larvas de Aedes aegypti en un día.
"Si en cada vivienda los depósitos tienen dos peces, habrá un gran impacto en la lucha contra el Aedes", instó Molina.
De acuerdo con el diario, el uso de guppies como control biológico del mosquito Aedes aegypti ya se ha aplicado con buenos resultados en Estados Unidos, Colombia, Brasil, Perú y El Salvador. Un ejemplo fue en Nueva Orleans, EEUU, donde se usaron estos peces para controlar las larvas de mosquitos tras la inundación que dejó el huracán Katrina (2005).
Desde finales de septiembre y hasta inicios de noviembre, es la etapa en que se registra históricamente un pico máximo en la infestación del mosquito Aedes aegypti. En Cuba las altas temperaturas y la elevada humedad son factores que influyen en la propagación del vector, además del vertimiento de residuales líquidos y sólidos, que generan importantes focos de infección.
Para esta lucha contra el vector, los científicos cubanos también estudian el uso de la bacteria wolbachia, que impide que el insecto transfiera los virus, y la esterilización de mosquitos machos.
La wolbachia existe en el 60% de los zancudos, pero no en los Aedes, por lo que el proyecto consiste en inyectar a mosquitos con la bacteria en un laboratorio. Luego de la inoculación, estos son liberados para que se reproduzcan y transmitan así la infección a la descendencia hasta no sean necesarias nuevas liberaciones.
En los artrópodos, la wolbachia es capaz de alterar significativamente las capacidades reproductoras de sus hospedadores, lo que se estima suceda igual con los Aedes.