"Hubo esa retención de los uniformados, 34 militares y cuatro policías, ya se llegó a las negociaciones, en este momento está levantada esa alerta, está solucionado el problema, los uniformados ya están fuera de la comunidad", afirmó Loza.
Los soldados y policías fueron retenidos por la comunidad indígena en el marco de las protestas en contra de las medidas económicas anunciadas el 1 de octubre pasado por el Gobierno de Lenín Moreno.
En ese diálogo "los escuchamos, nos escucharon, y se consensuó que se libere a los militares porque este es un acto ilegal y nuestra Constitución prevé sanción para ese tipo de acciones y la gente entendió", dijo Loza.
A los uniformados "no se los maltrató, se los trató con mucha consideración, con respeto, como tiene que ser", aseguró.
Los militares y policías, desde el inicio del paro contra las medidas económicas, han "actuado con mesura, con prudencia, y seguirán así porque el Gobierno del presidente Lenín Moreno es un Gobierno de paz, es un Gobierno de diálogo que jamás ha perseguido a nadie, ni perseguirá, lo que perseguimos nosotros es tener un país mejor", sostuvo la gobernadora.
La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador convocó este 7 de octubre, a través de redes sociales, a los medios de comunicación a una rueda de prensa sobre el "anuncio de la llegada del Movimiento Indígena a Quito y la huelga nacional del 9 de octubre de 2019, contra las medidas económicas implantadas por el Gobierno Nacional".
La semana pasada transportistas convocaron un paro general contra las últimas medidas anunciadas por el Gobierno, especialmente la eliminación de los subsidios al combustible.
A ellos se sumaron otros sectores que han efectuado movilizaciones en distintos puntos del país contra el denominado "paquetazo" económico de Moreno.
Romo aseguró que no hubo "ni una sola persona muerta como resultado de los enfrentamientos, el día de hoy [6 de octubre] hubo una persona que perdió su vida en el arrollamiento en la zona de Molleturo, no fue resultado de un enfrentamiento con la fuerza pública".
Entre las medidas económicas anunciadas el 1 de octubre por el Gobierno se encuentran eliminar el subsidio de 1.300 millones de dólares a los precios del diésel y la gasolina, suprimir o reducir los aranceles para la importación de maquinaria, equipos y materia prima tanto agrícola como industrial y quitar los gravámenes a las importaciones de tecnología así como el anticipo del impuesto a la renta.
En cuanto al empleo público, Moreno anunció que los nuevos contratos de empleo del sector público se negociarán con remuneraciones un 20% más bajas, que los trabajadores aportarán mensualmente un día de su salario y que se les recortarán las vacaciones a 15 días por año, desde los 30 que tenían hasta el momento.