"El oro es una buena moneda alternativa porque es segura y porque no cuesta nada poseerla en comparación con el pago de tasas negativas de los depósitos", comentó el analista.
En este contexto, los precios del oro podrían subir alrededor de un 30% hasta alcanzar los 2.000 dólares por onza el próximo año, pronosticó Roche.
Los comentarios de Roche llegan después de las medidas que adoptaron los principales bancos centrales. La Reserva Federal de EEUU redujo su tasa de interés de referencia a un rango de 1,75% a 2%. El Banco Central Europeo también endureció la tasa hasta el -0,5% y lanzó un nuevo programa de compra de bonos.
Cómo un trío manipuló los precios del oro y la plata a su favor sin que nadie lo supiera
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 17 сентября 2019 г.
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Mientras tanto, Rusia sigue aumentando sus reservas de oro. El Banco de Rusia compró en el primer trimestre de 2019 más oro que cualquier otro país, en su afán de reducir la dependencia del dólar estadounidense.