Fuentes de la Fiscalía confirmaron a Sputnik que se presentó una denuncia contra el ministro y contra otras diez personas presuntamente implicadas en las irregularidades.
La investigación policial concluyó que el ministro lideró un esquema de desvío de recursos públicos a través de candidaturas femeninas de fachada, que servían únicamente para captar dinero.
En 2018, cuando el ahora ministro presidía el partido en el estado de Minas Gerais (sureste) cuatro candidaturas de mujeres fueron de las que más dinero público recibieron para realizar la campaña, aprovechando que una nueva ley estimulaba la entrada de mujeres en política.
En un comunicado, el ministro aseguró que aún no fue notificado oficialmente de la decisión de la Fiscalía, pero que confía en que la verdad prevalecerá y su inocencia "será comprobada".
Además, añade que la investigación tiene como base una "campaña difamatoria y mentirosa" y que no cometió ningún tipo de irregularidad en la campaña electoral de 2018.
El presidente Jair Bolsonaro no se manifestó sobre el caso de momento, pero el portavoz presidencial, Otávio Rego Barros, aseguró a medios locales que el ministro seguirá en el cargo hasta que avance el proceso.