En el vídeo compartido en las redes sociales es posible ver cómo el curioso zorro se acerca de la cámara del móvil, empieza a oler el dispositivo y, para sorpresa del dueño, lo toma con la boca y huye con él.
"Adiós móvil, fue bueno conocerte. Un consejo: no pongas tu teléfono para filmar en un lugar secreto o, de lo contrario, estarás buscándolo por el bosque durante 20 minutos", bromeó el dueño del teléfono al compartir el vídeo.
Quizás ahora aprendió a no grabar a otros sin su autorización, especialmente si se trata de un zorrito.