En lugar de las valiosas joyas, Meghan ha optado por usar dos anillos de oro más sencillos: uno liso y otro con una piedra turquesa de la marca Jennifer Meyer, cuyo valor ronda los 250 dólares.
El vestido azul de la marca Veronica Beard que Meghan llevaba puesto en su primer día en el continente africano es el mismo que utilizó durante su viaje a Tonga a finales de octubre del año pasado. El segundo día de la visita a Sudáfrica, Meghan lució un largo vestido a rayas de Martin Grant, el mismo que llevó en la gira de la pareja real por Australia en 2018.
Las ropas del bebé real también llamaron la atención por su sencillez. Archie, el más joven miembro de la realeza en participar en una gira oficial, fue presentado al público en un mono azul y blanco de H&M que cuesta 16 dólares en la web de la tienda.
Durante la gira de 10 días, la pareja real de Sussex y el bebé Archie visitan diversas iniciativas benéficas en Sudáfrica. Luego, el príncipe Enrique viajará solo a Botsuana, Angola y Malaui. El objetivo del viaje es impulsar las relaciones del Reino Unido en el extranjero.
