"Hacemos una denuncia que va dirigida al desmantelamiento, al hurto que está siendo sometida la empresa Monómero, colombo-venezolana, ubicada en Barranquilla, Colombia; esta asociación para delinquir está encabezada por el ciudadano Juan Guaidó y una junta directiva usurpadora a la cual denunciamos", expresó Quevedo en un pronunciamiento transmitido por la estatal Venezolana de Televisión.
Además, Quevedo también responsabilizó a los miembros de la junta directiva designada por Guaidó: Jhon Bilbao, Carmen Elisa Hernández, José Alberto De Antonio, José Ignacio González, Yelí Reyes, Javier Linares, Ramón Crespo, Nelson De la Roca y Luis Hurtado.
"Una compañía activa que estaba totalmente en funcionamiento para 2018, estaba produciendo más de 860.000 toneladas de fertilizantes (…) en 2019 a esta fecha Monómeros está produciendo el 22% de su capacidad operativa, es decir, 176.000 toneladas", indicó.
El ministro venezolano señaló que recibieron información de que el 19 de septiembre se produjo una explosión en esa planta, en el área de sulfato de sodio.
"Monómeros informa que hoy 19 de septiembre se presentó una emergencia en la planta de sulfato de sodio del complejo industrial de Monómeros, la cual se encontraba fuera de servicio y en proceso de desmonte", sostuvo Quevedo, tras leer un comunicado emitido por esa empresa.
El presidente de Petróleos de Venezuela, manifestó que ese comunicado deja en evidencia que la misma junta "usurpadora" reconoce el desmantelamiento para vender por partes una empresa operativa.
Quevedo pidió abrir una investigación sobre el presunto robo de Monómeros, por parte de Guaidó y sus aliados en el exterior.
De igual manera, el ministro aseguró que con esas acciones han buscado afectar el mercado interno venezolano.
Monómeros es una empresa de responsabilidad limitada destinada a la producción de caprolactama (materia prima del nylon) y de fertilizantes compuestos.
En 2006, los accionistas colombianos de la empresa decidieron vender sus participaciones a la estatal venezolana Petroquímica de Venezuela (Pequiven).
Esta es la segunda empresa venezolana en el extranjero de la cual el Gobierno acusa a Guaidó de robo, la primera fue Citgo, en Estados Unidos.