"Tómese un momento para leer esto y ver si está en una de las zonas evacuación para este lunes 2 de septiembre a las 12:00 del mediodía", publicó en Twitter el gobernador de Carolina del Sur, Henry McMaster.
Please take a moment to read this see if you are in one of the zones being evacuated tomorrow, Monday, September 2 at 12:00 noon. #HurricaneDorian https://t.co/iSvOzkWnxU
— Gov. Henry McMaster (@henrymcmaster) September 1, 2019
Por su parte, el gobernador de Georgia, Brian P. Kemp, dijo que partir del mediodía de este 2 de septiembre las personas que estén en los condados de Bryan, Camden, Chatham, Glynn, Liberty y McIntosh deberán abandonar sus hogares debido al huracán.
Se prevé que Dorian se acerque a esos dos estados; los vientos fuertes podrían llegar a Georgia el 3 de septiembre, informó el diario local The New York Times.
"Sabemos que no podemos hacer felices a todos, pero creemos que podemos mantener a todos vivos", dijo McMaster en una conferencia de prensa.
El gobernador de Carolina del Norte también declaró el estado de emergencia.
El huracán Dorian se cobró al menos una vida a su paso por las islas Ábaco y Bahamas, reportó el diario digital Bahama Press.
Más tarde, el diario reportó que el nivel del agua en el aeropuerto internacional de Gran Bahama alcanza cinco pies, o más de 1,5 metros, y que las comunidades en Ábaco están inundadas.
Muchas personas en Ábaco siguen desaparecidas y se teme que estén muertas.
.@realDonaldTrump niega haber propuesto lanzar bombas nucleares sobre huracanes 🌪️💣https://t.co/EEP2sRKxNF
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) August 26, 2019
Al menos 1.054 vuelos fueron cancelados este 2 de septiembre en EEUU ante el avance del Dorian, informó la página web de FlightAware, una compañía que rastrea los vuelos de las aeronaves civiles.
Además, el huracán pudo haber destruido o dañado hasta 13.000 viviendas a su paso por las islas Ábaco y Bahamas, reportó este 2 de septiembre la Federación Internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Roja (FICR).
El huracán se encontraba a unos 60 kilómetros al este de Freeport, Gran Bahama, y unos 190 kilómetros al este de West Palm Beach, en Florida, y se movía hacia el oeste con vientos máximos sostenidos de 270 km/h.
Según la Cruz Roja de EEUU, unos 19 millones de personas viven en las áreas que podrían verse afectadas por la tormenta, y hasta 50.000 personas residente en Florida, Georgia y Carolina del Sur podrían necesitar refugio de emergencia.