Dirigiéndose hacia el sur del continente, el humo sigue su curso a la provincia de Buenos Aires, en el centro del territorio argentino. "Estamos monitoreando el ingreso de humo liberado por los incendios del Gran Chaco y la Amazonía", informó el Sistema Meteorológico Nacional de Argentina el 24 de agosto, cuando se registró su presencia por primera vez.
El organismo indicó que existen "más de 50 mil focos activos entre Brasil, Bolivia, Paraguay y Argentina" y explicó que "el grueso de la concentración de humo estará en niveles superiores a los 1.000/1.500 metros sobre el nivel del mar". Sin embargo, advirtió que "es posible que parte del humo pueda depositarse en capas cercanas a la superficie, en concentraciones bajas y provocar disminución en la visibilidad".
El Instituto Uruguayo de Meteorología, por su parte, aclaró que la difusión del humo se debe a "la corriente en chorro de capas bajas sudamericanas" que lo traslada "desde la región en que se producen los incendios hacia otras zonas, alcanzando a los países del sur del continente".
La autoridad meteorológica uruguaya informó además que Uruguay ya había sido afectado por el humo amazónico durante la primera quincena de agosto. En ese momento, se mantuvo durante varios días "como un velo grisáceo".
El Gobierno de Perú también debió informar a su población ante la preocupación que despiertan los incendios en la selva amazónica. Ante la llegada del humo al territorio, el Ministerio del Ambiente instaló el 23 de agosto un equipo de medición de la calidad del aire en Iñapari, la capital de la provincia de Tahuamanu, una de las tres que conforman el departamento de Madre de Dios, limítrofe con Brasil.
Según el Gobierno peruano, los resultados mostraron que "las concentraciones de material particulado grueso y fino no superan los valores establecidos en los estándares de calidad ambiental". Asimismo, la cartera ambiental aseguró que los valores que sobrepasaron la normativa "fueron puntuales y no se han mantenido constantes a lo largo de las 24 horas de la medición".
Paraguay, en tanto, no solo sufre las consecuencias del humo amazónico sino que lucha contra un gran incendio en la zona del Pantanal Paraguayo, un extenso territorio de humedales y reservas ecológicas que Paraguay comparte con Bolivia y Brasil. A su vez, los Gobiernos de Colombia, Venezuela y Ecuador también están enfocados en combatir y prevenir nuevos focos en sus territorios amazónicos.
Por supuesto, las plataformas tecnológicas y las redes sociales suelen adelantarse a las advertencias meteorológicas de los Gobiernos.
¿quiéres ver cómo se quema la amazonia? aquí está el link:https://t.co/o1u5sZuZNg https://t.co/o1u5sZuZNg
— Giovanna Tassi (@sikuanga) August 21, 2019
Además de las fotografías y vídeos de lo que ocurre en diferentes regiones de la Amazonía, también se viralizó un mapa de la aplicación Windy que permite seguir en tiempo real la concentración de dióxido de carbono en Suramérica.