"Los periodistas tienen los dispositivos. No nosotros. Pedimos una copia para ejercer nuestra defensa y se nos la ha negado nuevamente (...) necesitamos una copia de los aparatos para saber si son o no son ciertas. (...) Nuevamente lo que evidenciamos es que por ser amigo de alguien o por haber trabajado con alguien se lo está tratando de culpar de algún tipo de delito", dijo el abogado Carlos Soria en un vídeo difundido por Diario Expreso.
La Fiscalía señaló el 15 de agosto que tenía la clave de acceso al celular de Bini y que gracias a ella encontró "evidencias de que se intentó forzar las seguridades de los sistemas informáticos de Petroecuador, de la extinta Secretaría Nacional de Inteligencia y de la Corporación Nacional de Telecomunicaciones (CNT)".
La Fiscalía indicó que hace unos días las autoridades descubrieron una de sus claves usando imágenes de seguridad del edificio donde Bini vivía en Quito.
El celular fue analizado por criminalística de la Policía y encontraron un archivo del 6 de octubre del 2015, en el que existe un supuesto registro del intento de hackeo a las tres instituciones públicas, señaló el diario local El Telégrafo.
El ciudadano sueco estuvo dos meses preso en la cárcel de El Inca, en el norte de Quito.
El 20 de junio pasado fue liberado cuando la Corte Provincial de Justicia de Pichincha aceptó un recurso de habeas corpus presentado por su defensa, que argumentó falta al debido proceso e irrespeto a la presunción de inocencia.
Bini dijo a Sputnik a principios de julio pasado que en El Inca solo podía ver la luz del sol y tomar aire fresco durante cuatro o cinco horas por semana.