En una declaración difundida este 22 de agosto, Ley recordó que el país ya cumple con los requisitos de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestre (CITES).
"El mercado interno de Australia no representa una amenaza importante para el comercio mundial de marfil, pero es importante asegurarse de que no queden puertas traseras para alentar la actividad ilegal de los que buscan eludir los principios de la CITES", manifestó Ley.
En noviembre próximo, la ministra planea reunirse con los titulares de Medio Ambiente de los estados y los territorios federales que componen Australia, para abordar los detalles.
Según el canal ABC, el comité parlamentario que investiga el comercio de marfil y cuerno de rinoceronte en Australia formuló una decena de recomendaciones sobre cómo poner fin a este tráfico.
Entre las exenciones que propone el comité figuran los instrumentos musicales hechos antes de 1975 con menos del 20% de marfil o cuerno de rinoceronte.
El Fondo Internacional para el Bienestar Animal (IFAW) estima que de 20.000 a 50.000 son asesinados cada año por cazadores de marfil. La caza de cuernos de rinocerontes costó la vida a más de 1.000 animales en 2017.