"Hoy hemos solicitado con la parte china convocar una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU en relación con las declaraciones de EEUU sobre sus planes de desarrollar y desplegar misiles de medio alcance", dijo Polianski.
Se espera que la reunión se celebre el 22 de agosto.
El Pentágono informó que realizó el 18 de agosto un ensayo de vuelo de un misil crucero convencional lanzado desde tierra, que dio en su objetivo tras volar más de 500 kilómetros.
El 2 de agosto, Washington rompió definitivamente el Tratado INF (Tratado de Eliminación de Misiles de Alcance Medio y Más Corto) que prohibía el despliegue de misiles de crucero con alcance de entre 500 y 5.500 kilómetros.
El acuerdo, considerado piedra angular de la seguridad en Europa, había sido firmado en 1987 y no tenía fecha de caducidad.
Seis meses antes, EEUU suspendió sus obligaciones en el marco del acuerdo alegando supuestas infracciones por parte de Rusia, acusación que siempre se rechazó.
Rusia anunció la suspensión de su compromiso con el Tratado INF, pero al mismo tiempo declaró que Moscú no desea implicarse en una carrera armamentista, mantiene sus propuestas de desarme y esperará a que EEUU esté dispuesto a entablar conversaciones al respecto.
A principios de febrero pasado, el Ministerio ruso de Defensa publicó imágenes satelitales de una planta de la compañía estadounidense Raytheon, en Arizona, en la que desde hace dos años se llevan a cabo los trabajos para fabricar misiles de medio alcance proscritos por el Tratado INF.
El Ministerio ruso desveló también que ya en noviembre de 2017 el Congreso de EEUU asignó al Pentágono el primer monto de 58 millones de dólares para el desarrollo de un misil prohibido.