"Lo sucedido la semana pasada han cambiado Hong Kong, se ha hecho un lugar inseguro, inestable", dijo Lam en una conferencia de prensa.
"El aeropuerto paralizado ayer [12 de agosto], el bloqueo del túnel submarino, ataques a comisarías, el lanzamiento de botellas con mezclas incendiarias y bombas de humo hundieron a Hong Kong en el caos", indicó, agregando que esos "actos premeditados de violencia en nombre de la libertad están dañando el Estado de derecho".
La jefa del Ejecutivo de Hong Kong volvió a llamar a los manifestantes a dejar de lado sus diferencias.
"Tómense un momento para pensar, miren nuestra ciudad, nuestro hogar ¿Realmente quieren que lo lleven al abismo?", preguntó.
Lam aseguró que la recuperación del centro financiero podría llevar mucho tiempo.
Suspención de vuelos
El aeropuerto internacional de Hong Kong anunció la suspención de todas las operaciones del check-in luego de que una sentada de manifestantes que protestan contra el actual Gobierno provocara la suspensión de centenares de vuelos.
Desde el 9 de junio, Hong Kong vive una oleada de protestas cuyo detonante fue la controvertida ley de extradición que permitiría entregar a los prófugos de la justicia a Taiwán, Macao y la China continental.
Los críticos de esta normativa temen la entrega de disidentes políticos a Pekín.
El 15 de junio, el Gobierno de Hong Kong suspendió la polémica ley, pero se negó a revocarla por completo, por lo que las protestas y los choques entre las fuerzas del orden y los manifestantes continúan.