En Colombia se produjo una "fuerte alza" del dólar de casi 60 pesos, equivalente a una suba de 1,58% de la divisa estadounidense, informó el diario El Espectador.
"Este lunes (12 de agosto) no hay otra noticia que explique por qué el peso colombiano se está devaluando, por lo que debe haber algún coletazo que nos está llegando por cuenta de los resultados de las elecciones argentinas. Sin embargo, Argentina no es el único culpable", dijo el gerente de investigaciones económicas de Casa de Bolsa, Juan David Ballén.
El índice Merval de la Bolsa de Valores de Buenos Aires cayó en total 37,8%; mientras las acciones de las empresas argentinas en la bolsa de Nueva York se desplomaron a su vez a la mitad de su valor y el peso se desplomó 25% respecto del dólar luego de que una alianza opositora ampliamente integrada por peronistas le sacara una ventaja de 15 puntos al oficialismo en las elecciones primarias del 11 de agosto.
En México el peso tuvo una depreciación de 1,46%, y cerró en 19,02% para la compra y en 19,87 para la venta.
Los analistas financieros mexicanos sostienen que la posibilidad de que el actual presidente argentino Mauricio Macri no gane las elecciones de octubre "eleva la incertidumbre con respecto a la estabilidad de las economías latinoamericanas".
En Chile el dólar también comenzó con "fuerte alza", ya que el tipo de cambio aumentó 10 pesos, informó el diario La Tercera, pasando a cotizarse a 721 unidades para la venta.
También la moneda uruguaya cayó respecto del dólar 55 centésimos, cotizándose al cierre en 36,6% a la venta.
El Banco Central uruguayo salió temprano a amortiguar la depreciación vendiendo dólares a 35,90 pesos en el mercado mayorista, según el diario El Observador.
Las PASO en Argentina, que tuvieron una concurrencia a las urnas del 75,8% de los habilitados para votar, dejaron fuera de la carrera electoral a cuatro de las 10 fórmulas presidenciales que competían y que no alcanzaron un 1,5% de los votos para presentarse a las elecciones de octubre.
En los comicios del 27 de octubre será electo presidente quien obtenga al menos el 45% de los sufragios o alcance el 40% y una diferencia mayor a 10 puntos sobre el segundo candidato más votado.