"Sobre el operativo reportado este día en Misisipi la Secretaría de Relaciones Exteriores informa que el Consulado de México en New Orleans activó el grupo de respuesta rápida", dijo la oficina del canciller Marcelo Ebrard en sus cuentas de redes sociales.
El consulado mexicano en esa ciudad de la costa estadounidense del Golfo de México "entró en contacto con la oficina de ICE para solicitar la lista de personas mexicanas detenidas y coordinó entrevistas consulares".
Los funcionarios consulares mexicanos viajaron a Jackson, Misisipi, donde la fuerza laboral está conformada sobre todo por inmigrantes latinoamericanos "con el fin de entrevistar a los mexicanos detenidos y brindar asistencia a sus familias".
"Los padres de familia afectados con los operativos en Misisipi, que tengan menores en las escuelas de la zona, éstas ya están solicitando que los contactos de emergencia o un familiar que demuestre la relación familiar con el menor, pueden recoger a los niños", dijo la cancillería en las redes sociales ofreciendo teléfonos de emergencia.
Las autoridades migratorias estadounidenses enfocaron su operativo en una zona de fábricas, en particular sobre siete plantas procesadoras de alimentos.
Unos 600 agentes migratorios inspeccionaron las plantas de alimentos y rodearon los perímetros para evitar que los trabajadores escaparan.
Los primeros reportes indican que los agentes de inmigración llenaron dos autobuses de hombres y uno más de mujeres en la fábrica procesadora de carne de pollo Koch Foods en el pueblo de Morton, 64 kilómetros al este de Jackson, y los trasladaron a un hangar militar para ser procesados por presuntas violaciones migratorias.
La prensa de EEUU reportó que unas 70 personas, entre familiares, amigos y residentes del área gritaban "¡Suéltenlos!, ¡Suéltenlos!".
El director interino del ICE, Matthew Albence, dijo a medios estadounidenses que el operativo "supone la mayor redada de este tipo en al menos una década y probablemente el más grande de la historia en un solo estado".
El consulado mexicano entró en contacto también con la red local de organizaciones civiles para coordinar las acciones de asistencia y protección a las personas detenidas.
Trump visitó los lugares de dos masacres perpetradas por hombres solitarios armados que mataron a 31 personas el fin de semana, en Dayton, estado de Ohio (noreste), y en El Paso, Texas (sur).
En El Paso, con más de 80% de población de origen mexicano, el atacante asesinó a ocho personas mexicanas, y el Gobierno de México presentará demandas internacionales de "acto terrorista" contra la comunidad mexicana en EEUU.