El portavoz de la Cancillería pakistaní, Mohammad Faisal, señaló en una declaración emitida el 5 de agosto que Jammu y Cachemira es reconocido internacionalmente como "un territorio en disputa", por lo que "ninguna medida unilateral del Gobierno de la India puede cambiar ese estatus" ni será aceptada por Pakistán y el pueblo cachemir.
"Como parte de esta disputa internacional, Pakistán ejercerá todas las opciones posibles para contrarrestar los pasos ilegales", advirtió Faisal.
El presidente de Pakistán, Arif Alvi, convocó para el 6 de agosto una sesión conjunta del Parlamento para debatir la situación, reportó el canal Geo News.
Según el canal Dunya News, el jefe del Estado Mayor del Ejército pakistaní, general Qamar Javed Bajwa, también asistirá mañana a la sesión parlamentaria.
El Gobierno de la India decidió este 5 de agosto anular las cláusulas constitucionales que consagraban la autonomía de Jammu y Cachemira y transformar este estado, fronterizo con Pakistán, en un territorio de la unión separado de Ladakh que pasará a formar una entidad aparte.
La decisión, a la que siguió el envío de nuevos refuerzos militares a Jammu y Cachemira, fue anunciada poco después de que el gobierno regional exhortara a peregrinos y turistas a abandonar de inmediato la zona alegando supuestas amenazas terroristas contra la peregrinación hindú a la cueva de Amarnath.
La supresión de la autonomía provocó fuertes críticas de la oposición, ante todo eminentes políticos cachemires, algunos de los cuales han sido puestos bajo arresto domiciliario.
En Jammu y Cachemira, el único estado indio en el que los musulmanes representan mayoría, operan grupos separatistas que abogan por la independencia o la unión con Pakistán.