"La Policía arrestó a siete hombres y una mujer sospechosos de guardar armas con fines de ataque, y explosivos sin licencia", dice el comunicado.
El texto precisa que los policías arrestaron a los sospechosos en el distrito Sha Tin, al este de Hong Kong.
Durante la redada fueron confiscados componentes para fabricar bombas incendiarias, arcos y flechas.
Las detenciones provocaron una nueva ola de protestas en el distrito Sha Tin, donde unas 100 personas construyeron barricadas cerca de la estación de Policía.
Desde junio, millones de personas protestan en Hong Kong contra la polémica ley de extradición, que permitiría a Hong Kong entregar a prófugos a los territorios con los que no tiene acuerdos formales de extradición, como Taiwán, Macao y la China continental.
El 15 de junio, el Gobierno de Hong Kong suspendió el controvertido proyecto de ley, pero se negó a revocar por completo las enmiendas correspondientes, por lo que las protestas continuaron.
Según la Policía, los manifestantes radicales son cada vez más agresivos, cometen actos de vandalismo, provocan incendios y atacan a policías.