En las imágenes se puede contemplar una revolución y media de una molécula de sulfuro de carbonilo, o más bien de su campo magnético, que cambia a medida que esta gira sobre su eje.
A pesar de los avances tecnológicos de los últimos años, se trata de una tarea extremadamente difícil, puesto que la rotación filmada tomó tan solo 125 billonésimas de segundo —125 picosegundos—.
Las imágenes obtenidas arrojan más luz sobre la física cuántica y tienen un valor incalculable para el desarrollo de esta rama de la ciencia. Así, informan los investigadores, en el vídeo se muestra la ubicación probable de la molécula en cada instante del tiempo, puesto que las leyes de la física cuántica difieren de nuestra comprensión de la ubicación.
Otro beneficio de este descubrimiento es la posibilidad de emplear este método para el estudio de otros procesos de nivel molecular.