Lo último que nos gusta pensar cuando planificamos nuestras vacaciones es en los posibles problemas y contratiempos que pueden surgir. Por ansiedad o haraganería, hay muchos viajeros que no contratan seguros y llegan al lugar de destino incluso desconociendo cómo funciona su sistema sanitario, y terminan varados en el exterior con problemas de salud que requieren atención médica y… pagando una fortuna.
La mayoría de los viajeros latinoamericanos que sí contratan una cobertura de salud, pagan por un plan de entre 25.000 y 30.000 dólares. Según el periódico argentino Clarín, ese tipo de asistencia cubre al viajero en caso de padecer una indigestión, un resfrío, algún problema odontológico.
No obstante, si se requiere cirugía, internación o traslado sanitario, ese monto no lo cubre, sea en Asia o en Suramérica. Si el viajero sufre un incidente que requiere hospitalización en terapia intensiva o una cirugía por apendicitis, cuesta unos 40.000 dólares, y en EEUU costaría más del doble.
La sanidad en el país norteamericano es completamente diferente a la del resto de América o Europa. Todos los centros médicos son privados y para conseguir ciertas medicinas que en otros países se pueden considerar normales, es necesario pasar por consulta previa. En Miami, por ejemplo, cualquier consulta cuesta como mínimo 300 dólares.
Por ello las grandes compañías recomiendan viajar a EEUU (o al Sudeste de Asia) con un seguro que cubra no menos de 150.000 dólares. Para Europa aconsejan pagar por uno de entre 60.000 y 150.000 dólares, y a Sudamérica uno que ofrezca como mínimo 60.000 dólares de cobertura.
¿Cómo saber qué seguro me conviene contratar?
Antes de pagar un seguro, es importante prestar atención al monto de la cobertura farmacológica, odontológica y de internación.
Veamos qué ofrecen dos grandes aseguradoras en caso de viajar en agosto por una semana a los países del Caribe y México, desde Uruguay.
La cobertura más barata de Assist Card cuesta unos 70 dólares y ofrece un seguro de hasta 60.000 dólares.
Por este monto ofrece asistencia médica en caso de accidente y en caso de una enfermedad no preexistente. También brinda cobertura odontológica de urgencia de hasta 500 dólares, unos 300 dólares por pieza.
El seguro más cara de Assist Card cuesta 84 dólares y cubre hasta 250.000 dólares. En caso de accidente o enfermedad no preexistente, tiene una asistencia médica de hasta 250.000 dólares. Si necesita consultar a un odontólogo de urgencia, paga hasta 700 dólares.
Los precios de Assist Card no varían según la edad del viajero. La cobertura clásica incluye los traslados y repatriación sanitaria, la "privileged", cubre los traslados, y la repatriación hasta 100.000 dólares.
Otra de los seguros más conocidos en Latinoamérica son los brindados por Universal Assistance, que sí varía el precio de la cobertura según la edad del viajero.
Para un joven adulto, ofrece un seguro que cuesta 97 dólares y cubre hasta 300.000 dólares en asistencia médica en caso de enfermedad (en caso de existir una enfermedad preexistente, 10.000), 250.000 dólares en caso de sufrir un accidente, y hasta cinco días complementarios por internación.
También incluye el traslado y repatriación sanitaria en caso de accidente o enfermedad, 2.500 dólares para medicamentos en internación o ambulatorio, y hasta 800 dólares si se debe consultar a un odontólogo.
La tarifa más barata de Universal Assistance cuesta 66 dólares, y cubre hasta 80.000 dólares en caso de enfermedad o accidente; 5.000 en caso de enfermedad preexistente y 2.000 para medicación ambulatoria.
En cuanto a la consulta odontológica, cubriría hasta 500 dólares, e incluye el traslado y repatriación sanitaria en caso de accidente o enfermedad.
Casos
La familia de la turista argentina Candela Saccone, de 15 años, sí había contratado un seguro cuando viajó en junio a Punta Cana, en República Dominicana, pero igualmente tuvo problemas con la aseguradora cuando se descompensó y tuvieron que internarla, informó Perfil.
Saccone sufrió un coma diabético y estuvo dos semanas internada en el hospital de Santo Domingo; la familia denunció que la empresa de asistencia demoró dos días el traslado del centro de salud local al de la capital del país, a pesar de que su crítico estado de salud así lo requería. Según comunicaron allegados al grupo familiar a Perfil, la empresa de asistencia demoró el traslado señalando que se encontraba "pidiendo presupuestos".
Hasta ese momento, los gastos médicos de Candela ascendían a 7.500 dólares y se acercaban al tope de 10.000 que cubría su seguro contratado. Finalmente, el 4 de julio, fue trasladada de regreso a Argentina, donde continúa recuperándose.
Otra argentina, Celeste Cevasco, de 27 años, a mediados de julio sufrió un grave accidente en Cancún, México, cuando se cayó de un primer piso de un departamento y se rompió un hombro, la pelvis, el sacro y la cadera, informó Clarín.
Cevasco había contratado un seguro que le cubrió los gastos médicos en México, incluída las operaciones a la que se tuvo que someter, pero no el traslado sanitario a Argentina, por eso la familia lanzó una colecta para pagarlo. Según Clarín, contratar un vuelo desde Argentina para la repatriación es más accesible que contratarlo desde México, donde cuesta unos 100.000 dólares.
Estas dos turistas argentinas no han sido las únicas que este 2019 han sufrido serios inconvenientes estando de viaje. En enero, una pareja de jubilados argentinos viajó a Tailandia. Pero su viaje idílico se convirtió en una pesadilla.
Según informó TN, la mujer sufrió un derrame cerebral en el hotel, quedó internada en una clínica de la ciudad de Chiang Mai y aunque sí contaba con una cobertura de salud, acumuó una deuda de 70.000 dólares.
Como si fuera poco, para regresar a la Argentina necesita al menos otros 20.000 dólares más para un vuelo con asistencia médica.