"En total, se han detenido a un total de 25 personas y se han detectado 69 víctimas afectadas por las estafas", informó la Policía Nacional a través de un comunicado.
Para llevar a cabo sus actividades ilícitas, uno de los grupos utilizaba herramientas tecnológicas con las que lanzaba masivamente correos electrónicos, suplantando la identidad de conocidas entidades financieras.
En dichos mensajes se informaba al cliente de una incidencia grave en su cuenta y se afirmaba que, para poder subsanarla, debía acceder a un dominio web que simulaba ser el de su entidad, donde debería introducir las claves de operaciones de acceso a la banca online.
Por su parte, el segundo grupo también se dedicaba a conseguir numeraciones de tarjetas de crédito, aunque en este caso eran revendidas a colaboradores que, en un nivel secundario, cometían fraudes o realizaban compras con tarjetas clonadas.
La Policía Nacional comunicó que, por el momento, no se llegó a cuantificar el volumen del fraude realizado por estos ciberdelincuentes.