"Yo he evaluado todo y mi reflexión es que el enfoque es otro, es ver cómo podemos seguir trabajando y darle continuidad a los proyectos que tenemos", respondió Rosselló cuando le preguntaron en el programa Nación Z de MegaTV por qué no renunciaba.
El gobernante agregó que tampoco dejaría la presidencia del Partido Nuevo Progresista (PNP, anexionista), como reclamaron opositores en una serie de marchas tras la revelación de 889 páginas de mensajes suyos en la plataforma de mensajería Telegram, divulgadas por el Centro de Periodismo Investigativo de Puerto Rico (CPI).
En el chat se discutió la posición del Gobierno sobre una propuesta de la Junta de Supervisión Fiscal para cancelar 6.000 millones de dólares de deuda y otra para una alianza pública-privada para los sistemas de transmisión y distribución de la Autoridad de Energía Eléctrica.
Rosselló negó que hubiera compartido información supuestamente confidencial en el chat con personas ajenas al Gobierno, y aseguró que prescindió de los contratos con las personas involucradas en su polémica conversación.
"Es difícil una autoevaluación sobre las cosas que escribí en el chat. Es bien fuerte ver cómo pude caer. Mis disculpas al pueblo de Puerto Rico es sincera", insistió Rosselló, que se comprometió a realizar auditorías constantes, registro de cabilderos y adiestramientos a contratistas para remediar la situación.
El ya conocido como #TelegramGate o #RickyLeaks forzó la renuncia del secretario de Estado, Luis Rivera Marín, y del director ejecutivo de la Autoridad de Asesoría Financiera y Agencia Fiscal de Puerto Rico, Christian Sobrino.
La gestión de Rosselló, marcada por una supervisión fiscal de EEUU a las finanzas de Puerto Rico que perdura desde 2016, también fue criticada por su pobre respuesta a los estragos del huracán María, la corrupción y la imposición de impopulares medidas de austeridad en una isla que lleva 12 años en recesión económica.
"Siento vergüenza ante todo lo que se está diciendo en estas comunicaciones privadas, la gente está disgustada, decepcionada por esta telenovela", declaró al respecto Jenniffer González-Colón, quien ocupa el curul sin voto de Puerto Rico en el Congreso de Estados Unidos.
Artistas como Ricky Martin, Lin-Manuel Miranda e incluso el trappero Bad Bunny se sumaron al coro que exige la renuncia de Rosselló, a quien le quedan aún 18 meses de mandato.