Los inversores extranjeros son los principales compradores de bonos rusos y hoy en día existen al menos tres factores que empujan a los no residentes a arriesgar e invertir en la deuda soberana de Rusia.
- La tasa de rendimiento de los bonos
- Las reservas internacionales
- El superávit presupuestario
Hoy en día la tasa de rendimiento de los bonos rusos varía entre 6,96% y 7,66%, según el Banco de Rusia. En contraste con la política monetaria aplicada por los bancos centrales de otros países estas condiciones parecen ser más ventajosas para los inversores extranjeros.
En segundo lugar las reservas internacionales de Rusia superaron el 1 de junio del 2019 más de 495.232 millones de dólares y podrían cubrir por completo su deuda externa en caso de que esto fuera necesario.
Otro factor radica en el superávit del presupuesto ruso que constituyó un 3,1% del PIB de Rusia o 1,561 billones de rublos —más de 24.757 millones de dólares—.
Uno de los factores que facilitaron la acumulación de reservas nacionales por parte de Rusia fue la así llamada regla presupuestaria. Según esta regla, todos los ingresos obtenidos en la industria del petróleo por encima del precio básico de 40 dólares por barril tenían que dirigirse a las arcas públicas del país. Esta regla beneficia al presupuesto ruso a medida que el precio de petróleo sigue creciendo.
Al tomar en consideración todos estos factores el riesgo de bancarrota de Rusia es muy pequeño. Esta es la razón por la que los inversores se apresuran a invertir su dinero en Rusia y el país euroasiático busca acumular sus reservas.
La Cámara de Representantes de EEUU aprobó una enmienda al proyecto de presupuesto militar para el año fiscal 2020. El documento prevé la posibilidad de introducir sanciones contra la deuda soberana de Rusia. Si esta medida se concreta, ningún ciudadano de EEUU comprar los bonos rusos.