"Rusia es un mercado estratégicamente importante para Visa; la compañía Visa está comprometida con su misión de garantizar el funcionamiento ininterrumpido de los pagos sin efectivo para todos los participantes del ecosistema de pagos: los bancos, las empresas comerciales y de servicios, y los consumidores", indicó la oficina de prensa.
Por su parte, el viceministro de Finanzas ruso, Alexéi Moiséev, declaró que Rusia duda que las enmiendas a la ley sobre el sistema nacional de pago provoquen la salida de las empresas Visa y MasterCard del país.
"La adopción de las enmiendas a la ley sobre el sistema nacional de pago no conducirá a que los sistemas de pago extranjeros abandonen Rusia, consideramos que no hay ninguna premisa para ello", dijo Moiséev a los periodistas.
El viceministro enfatizó que "las enmiendas no imponen limitaciones adicionales y están dirigidas a mantener la continuidad de los pagos, en lo que están interesados todos los participantes del mercado, sobre todo los consumidores de estos servicios".
Moiséev especificó que el objetivo de las enmiendas es hacer que las reglas de los operadores de todos los sistemas de pago que trabajan en Rusia se ajusten a la legislación rusa.
El Banco Central de Rusia, a la vez, está convencido de que todos los sistemas de pago continuarán trabajando como de costumbre en Rusia, por tanto no ve ningún motivo de preocupación.
El diario ruso Kommersant publicó este 12 de julio que los sistemas Visa y MasterCard pueden terminar su trabajo en Rusia debido a las enmiendas a la ley sobre el sistema de pago nacional.
Las enmiendas, que serán examinadas por la Duma de Estado (la Cámara Baja del Parlamento ruso) el próximo 23 de julio, prevén prohibir a las subsidiarias rusas de los sistemas de pago internacionales suspender las transacciones realizadas con las tarjetas de los bancos sometidos a sanciones.
Cualquier transacción suspendida se considerará un violación de la ley y podrá llevar a la exclusión de la empresa del registro del Banco Central de Rusia.