"No vamos a alardear, no se lo vamos a decir a nadie para evitar la divulgación en cuanto sea posible, porque cuanto antes se divulgue antes habrá recurso del otro lado (…) no lo comentemos públicamente, vamos a dejar que surja por otros canales para evitar precipitar un recurso de quien tiene una posición contraria a la nuestra", decía Dallagnol, jefe de los fiscales del caso Lava Jato, en el audio filtrado.
Fux argumentó que había que esperar la decisión de todo el plenario del Supremo sobre el recurso presentado por los diarios El País de España y Folha de São Paulo para entrevistar al expresidente en plena campaña electoral.
El fiscal terminaba su mensaje afirmando que la cancelación de la entrevista a Lula era "una buena noticia" para terminar la semana.
Mensajes de Telegram divulgados anteriormente por The Intercept ya habían mostrado que los fiscales que acusaron a Lula de corrupción estaban muy alarmados con la posibilidad de que el líder del Partido de los Trabajadores (PT) concediera entrevistas a la prensa durante la campaña, incluso cuando él había sido inhabilitado como candidato por encontrarse preso.
Otra procuradora, Isabel Groba, respondió "Mafiosos!!!!!!!!!", cuando supo que la defensa del expresidente había recurrido para que éste pudiese conceder la entrevista.
The Intercept comenzó a publicar hace un mes en cuentagotas mensajes privados de los fiscales de la Operación Lava Jato y del actual ministro de Justicia Sérgio Moro, quien como juez condenó a Lula, que evidencian cooperación indebida y otras irregularidades.
Para la defensa del expresidente Lula, los mensajes demuestran que Moro actuó como parte de la acusación y que nunca fue un juez imparcial, por lo que piden la anulación de la condena.
El ministro Moro negó cualquier tipo de conducta ilegal en sus recientes comparecencias en el Congreso, y esta semana anunció que se tomaría unos días de licencia entre el 15 y el 19 de julio por razones familiares.
Los aliados del Gobierno de Jair Bolsonaro en el Congreso defendieron que los mensajes de la plataforma Telegram podrían haber sido manipulados y exigieron al periodista Glenn Greenwald, fundador de The Intercept, que divulgara audios para demostrar su veracidad.
Este respondió que lo haría en breve y que se arrepentirían de haberlo pedido.