"Se está yendo en minutos", dijeron a Sputnik fuentes cercanas a la exmandataria, quien gobernó Argentina entre 2007 y 2015.
La defensa de la exmandataria pidió el 1 de julio la nulidad del debate oral y cuestionó que el juicio comenzara sin una pericia que aún no concluyó y que es una prueba clave, por ser una auditoría de las obras cuestionadas.
"El caso de Cristina Kirchner es inédito porque se la persigue de manera reiterada hasta límites absurdos", denunció el abogado de la legisladora, Carlos Beraldi, ante el tribunal oral.
Durante la audiencia de la víspera, los abogados plantearon las denominadas "cuestiones preliminares".
Por segunda vez desde que diera comienzo el juicio de la obra pública, que se celebra todos los lunes, la exmandataria se ausentó porque tenía actividad parlamentaria, lo que la autoriza a no asistir al juicio.
El próximo lunes 8 de julio no habrá debate oral por ser una jornada no laborable en Argentina.
El diagnóstico principal de Florencia Kirchner, de 28 años, es de trastorno de estrés postraumático, a lo que se suma "síndrome purpúrico, polineuropatía sensitiva desmielinizante, amenorrea, bajo peso corporal y linfedema ligero de miembros inferiores", según el reporte médico.
La hija menor de la expresidenta debía regresar a Argentina el 21 de marzo pasado, pero el TOF 8 la autorizó a permanecer en Cuba hasta el 1 de julio.