"Están en marcha unos juegos sucios de algunas fuerzas que no quieren que el Consejo de Europa esté integrado por 47 países (...) se trata básicamente de Reino Unido, Polonia y Ucrania, sus diputados se oponen a que nuestra delegación tenga la posibilidad de participar como miembro de pleno derecho en la PACE", dijo Volodin este 26 de junio en la sesión plenaria del hemiciclo.
El 24 de junio, después de cinco años, la PACE aprobó una moción que devuelve a la delegación parlamentaria rusa el derecho al voto con el apoyo de 118 legisladores, 62 en contra y 10 abstenciones.
Volodin remarcó la importancia de que el organismo internacional ratifique el derecho de voto de la delegación rusa.
El 25 de junio, un grupo de diputados impugnó la resolución de la PACE, la comisión de reglamento de la organización debe pronunciarse hoy miércoles 26 a este respecto.
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Con esta maniobra los ucranianos buscaban impedir que la delegación rusa participara en la votación para elegir al nuevo secretario general del Consejo de Europa, proceso programado para el 26 de junio.
Volodin indicó que una eventual limitación de los derechos de la delegación rusa será catalogada como una vulneración de los derechos de todos los ciudadanos rusos.
"Si se aprueban decisiones que limitan los derechos de nuestra delegación, las interpretaremos como una restricción de los derechos de todos nuestros ciudadanos", subrayó.
La delegación, sostuvo, no podrá representar plenamente a los ciudadanos de Rusia en la Asamblea Parlamentaria si se quebrantan sus derechos.
"Se oyen propuestas desequilibradas como impedir que Rusia integre los grupos de supervisión, impedir que presente informes o encabece las comisiones y los grupos de trabajo (...) Son decisiones que sepultarían el propio concepto del parlamentarismo, la democracia, más aún que la Asamblea Parlamentaria debe ser el organismo más abierto ya que fue creado precisamente para el diálogo", señaló.
Volodin advirtió que Rusia se retirará de la PACE si sus derechos son restringidos.
La PACE privó en abril de 2014 a la delegación rusa del derecho al voto, violando sus propios estatutos.
La medida vino después de que Crimea se escindiera de Ucrania y se reincorporara a Rusia, tras el referéndum celebrado en marzo de 2014, en el que más del 96% de los votantes avaló esta opción.
En respuesta a la decisión de la PACE, Rusia dejó de enviar a su delegación parlamentaria en 2016, un año después suspendió el pago de las cuotas hasta que no le sean restituidos completamente sus derechos.