Ya en los primeros días de batalla, el Ejército Rojo sufrió grandes pérdidas y de los 8.000 soldados que en Brest se encontraban, quedaron solamente 3.500 antes de concluir la primera semana de combate. Sin embargo, las tropas soviéticas lograron evitar la invasión a la ciudad por cerca de un mes.
Una inscripción evidencia la hazaña patriótica sin precedentes del pueblo soviético.
"¡Me muero, pero no me rindo! Adiós patria", escribió un soldado el 20 de julio de 1941 en una pared que ahora se encuentra en exposición en el Museo Central de las Fuerzas Armadas en Moscú.
La fortaleza de Brest es uno de los 13 lugares que recibió el título honorífico soviético de Ciudad Heroica (Fortaleza Heroica, en su caso) por la valentía de los soldados al defender su patria durante la Gran Guerra Patria —nombre dado por la historiografía soviética a la parte de la II Guerra Mundial focalizada en el frente del este, que enfrentó a la URSS y a la Alemania nazi—.
Para el 78 aniversario del inicio de la guerra, el Ministerio de Defensa de Rusia publicó en su web una serie de documentos desclasificados sobre el combate en la Fortaleza de Brest. Entre otras cosas, se dieron a conocer documentos sobre premios otorgados y recuerdos reales de los defensores de la fortaleza, registrados después de la guerra.